La rodilla de Ricky Rubio

El post de hoy no trata de ninguna hazaña del deporte mundial (aunque estoy trabajando en ello y pronto habrá novedades al respecto), sino de aclarar algunas cositas acerca de la lesión que sufrió Ricky Rubio el pasado 9 de marzo. Y me voy a permitir esta pequeña licencia, ya que he escuchado muchas contradicciones en cuanto a la lesión y al tiempo de recuperación, y como fisioterapeuta me gustaría comentarlo e intentar explicarlo de la forma más sencilla posible.

Hoy es el día en que el doctor Richard Steadman operará al español en la clínica que tiene en Vail (Colorado). La lesión del base de Minnesota consiste en una rotura total del ligamento cruzado anterior (LCA) de su rodilla izquierda. Normalmente este tipo de lesiones tienen lugar debido a un mal apoyo cuando la cadera y la rodilla se encuentran en flexión y en ligera rotación interna (como bien se puede apreciar en el vídeo de la lesión del ÑBA). En personas normales, lo más común es que estuviésemos hablando de un mínimo de 9 meses para una recuperación del 100% (a partir de una recuperación del 75% aprox. una persona puede hacer vida normal exceptuando la práctica de deporte y sobreesfuerzos). Pero el crack español es un deportista de élite, por lo que el tiempo de recuperación se acercaría más a los 6 que a los 9 meses, siempre y cuando no haya afectación del cartílago, aspecto que desconozco.

Desde pocos días después de la rotura del LCA Rubio ha ido haciendo ejercicios de fortalecimiento de cuádriceps para que en la recuperación no pierda mucha masa muscular y facilitar así la recuperación. Ahí ya está acortando plazos. Además, pasadas 48h desde la intervención quirúrgica ya se debe ir haciendo ejercicios de recuperación, movilidad y fortalecimiento. Un deportista de este calibre normalmente realiza unas 4 horas de gimnasio y unas 6 de piscina (aproximadamente), con lo que en la rehabilitación se van a ir acortando plazos  y evitando problemas derivados de la inmovilización que habría si en vez de un deportista profesional fuésemos cualquiera de nosotros. Cabe decir que yo no soy partidario de la inmovilización, y que tras dos días de la operación hay que ir moviendo poquito a poco la articulación.

Por lo tanto, como conclusión, si todo va bien el base de Masnou estaría listo para volver a las canchas a finales de septiembre a pleno rendimiento. Obviamente, por mucho que se quiera forzar, no llegaría a los JJOO de Londres, salvo que la lesión no fuese más leve que la que nos están hablando los médicos que le han exa minado. Pero Ricky dispondrá de más oportunidades de disputar unos JJOO, y por supuesto estoy seguro que se alzará con el anillo de la NBA en un futuro no muy lejano. ¡¡Ánimo Ricky!!